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¿Cómo hacer un mapa mental?

mapa mental

Podemos encontrar diferentes herramientas que ayudan a mejorar el estudio, siendo mucho más fácil memorizar y aprender los nuevos conocimientos. Con el mapa mental se puede lograr esto de manera visual, ordenada y dinámica.

De esta forma, los estudiantes pueden estructurar todo el contenido de forma que sea más sencillo de interpretar, adaptándose a cualquier campo de estudio y nivel educativo.

Con estas herramientas las personas pueden conseguir estudiar más fácil y eficazmente, entendiendo bien todo el contenido y estructurándolo a su manera.

¿Qué es un mapa mental?

Un mapa mental se define como una representación gráfica de los conceptos o temas que hay que estudiar, organizándolo, siguiendo una estructura más definida. Permite crear conexiones entre unas ideas con otras y haciéndolo de manera visual, para que toda la información quede sintetizada.

Algunos usos prácticos que podemos encontrar en los mapas mentales son:

  • Entender un tema o concepto
  • Buscar soluciones a una situación concreta
  • Analizar el problema
  • Estimular el pensamiento creativo
  • Sintetizar información
  • Impulsar la concentración

¿Para qué sirve un mapa mental?

El mapa mental tiene muchas funcionalidades a la hora de estudiar, entre ellas:

  • Estructurar
  • Clasificar
  • Visualizar
  • Organizar ideas.

De esta manera se puede retener la información más fácilmente y de forma más eficiente. Se organizan a través de burbujas para estructurar las ideas de manera visual, relacionando pensamientos y optimizando el aprendizaje.

Características de un mapa mental

En el momento de crear un mapa mental no hay una sola forma correcta, sino que podemos encontrar diferentes opciones. Hay que tener en cuenta algunas características a la hora de desarrollarlo, como, por ejemplo:

  1. Debe tener una idea central o eje sobre la que se desarrolle el resto de información. El título debe aparecer en el centro.
  2. Posteriormente, se añade la información en el sentido de las agujas del reloj elaborándola de manera radial. Las formas radiales ayudan a que el cerebro comprenda todo de forma más natural.
  3. Escribir las palabras clave ayudará a sintetizar la información.
  4. Se establece una jerarquía de conceptos e ideas.
  5. Es conveniente conectar a través de líneas o formas los conceptos que pueden tener relación. Esto fomenta la comprensión de los temas.
  6. Utilizar colores, formas o cualquier otro elemento ayuda a distinguir los conceptos.
  7. Las imágenes pueden ser un factor interesante para entender todo, por lo que es bueno incluirlas.
  8. Los mapas mentales se pueden hacer tanto a mano como de manera digital.

¿Qué beneficios aporta al estudio?

Utilizar el mapa mental como herramienta de estudio es una estrategia muy interesante que nos puede beneficiar en el momento de estudiar. Estudiar y crear un mapa mental nos puede aportar los siguientes beneficios:

  • Facilidad de hacer un mapa mental: la sencillez en la creación de un mapa mental permite ahorrar tiempo y poner en desarrollo la creatividad.
  • Se adapta a cualquier tema: se adapta a cualquier idea que se quiera desarrollar, sin importar la materia.
  • Ayuda a organizar las ideas: tener organización en el estudio y en la información es clave para ser más eficientes, favoreciendo la comprensión y la vinculación de ideas.
  • Son didácticos y entretenidos: los distintos colores, ilustraciones o decoraciones ayudan a crear mapas mentales estructurados.
  • Fomenta la creatividad: al no seguir un formato lineal, la creatividad está a flor de piel.
  • Aumenta la capacidad de análisis: ayuda a que los estudiantes puedan analizar ideas de manera aislada y en conjunto con otros elementos.
  • Fortalece la memoria: al crear una estructura del tema con imágenes, los mapas mentales pueden ser un gran aliado para recordar los conceptos en un largo plazo.

Objetivos de un mapa mental

El objetivo de las herramientas de estudio se basa en ayudar a los alumnos a estudiar mejor, por eso el mapa mental favorece la retención y la asociación de los diferentes conceptos mediante palabras clave, dibujos o esquemas con colores.

Es muy útil de cara a tomar apuntes, repasar conceptos o estudiar para los exámenes. Además de todo esto, ayudan a mejorar la concentración gracias a la creación de enlaces electroquímicos en el cerebro, que permiten desarrollar la imaginación y la capacidad de relacionar pensamientos.

Estructura del mapa mental: Como hemos dicho antes, la estructura que sigue el mapa mental es de forma radial, donde a partir de la idea principal se desarrollan las diferentes ideas y palabras. Dentro de esta estructura podemos encontrar 5 elementos.

Idea principal: La idea principal es el centro del mapa mental, donde a través de un dibujo, palabra o una combinación de ambos se puede desarrollar la idea. Debe ser lo más llamativo de todo el mapa, por lo que es ideal que esté acompañado de colores, imágenes u otro elemento.

Ramificaciones: Las ramificaciones son aquellos elementos que se emplean para unir las diferentes ideas de este recurso. Estas pueden seguir líneas rectas, curvas ramas de árbol etc.

Palabras clave: Las palabras clave ayudan a representar los diferentes conceptos que se quieren plasmar en el mapa mental. Son frases cortas o palabras solitarias que explican una idea.

Agrupaciones: Son las ideas básicas que tienen relación con el tema principal y que permiten que la tarea se asocie con un conjunto de datos.

Imágenes y soporte visual: Este elemento hace referencia a los dibujos, imágenes o símbolos entre otros que permiten hacer relaciones entre los conceptos, reteniendo así la información y destacando datos. Estos deben estar acompañados de colores apropiados para destacar esa información.

Pasos para realizar un mapa mental

Desarrollar un mapa mental es un proceso muy sencillo que fomenta la dinámica del estudiante. Para crear un buen mapa mental habrá que tener en cuenta los siguientes pasos:

  1. Lo primero de todo es hacer un resumen del contenido que se quiera plasmar, diferenciando las ideas principales de las secundarias.
  2. Es interesante hacer una lectura analítica sobre ese contenido, extrayendo las palabras clave e ideas más interesantes.
  3. Después hay que colocar el mapa sobre la hoja, estableciendo la idea principal en el centro de esta.
  4. De manera posterior, hay que dibujar las ramificaciones que salen de la idea principal. Se recomienda que como máximo haya 7 ramas.
  5. Cada ramificación debe tener un color diferente, siendo más sencillo de interpretar.
  6. No debemos olvidar que las ideas las debemos escribir siguiendo las agujas del reloj.
  7. Hay que emplear palabras claves, símbolos o imágenes para desglosar el tema.
  8. Conviene hacer conexiones entre las diferentes ideas, siendo más fácil para asociarlas.
  9. Si encerramos los puntos más importantes dentro de figuras lograremos destacarlos.
  10. Estas figuras pueden estar coloreadas o con imágenes para que sean más fáciles de diferenciar.

Cada vez podemos encontrar nuevos recursos que nos ayudan a mejorar el estudio y entender mejor toda la información que aprendemos. El mapa mental es una opción muy interesante para tener una estructura más clara sobre el tema o la materia que se desea estudiar.

Además, lograremos fomentar la creatividad y la habilidad del cerebro al poner en desarrollo prácticas para el estudio.

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